TIPO

Gr. typos, τύπος, prim. «marca, sello, forma» y, por tanto, en sentido abstracto, «modelo, imagen, figura». Aparece 16 veces en el NT, pero, por lo general, nunca se traduce como «tipo» en las versiones comunes. En su lugar, la RV tiene «señal», para denotar las marcas dejadas por los clavos en las manos de Jesús (Jn. 20:25); «figura», aplicada a una copia o imagen idolátrica (Hch. 7:43); Ro. 5:14); «modelo», según el cual había de construirse el Tabernáculo (Hch. 7:44; Heb. 8:5); carta «en estos términos» (Hch. 23:25); «forma» de enseñanza (Ro. 6:17); «ejemplo» a seguir (1 Cor. 10:6, 11; Fil. 3:17; 1 Tes. 1:7; 2 Tes. 3:9; 1 Ti. 4:12; Tit. 2:7; 1 Pd. 5:3), denotando la huella, marca o sello dejada por la conducta del Apóstol y los creyentes fieles.
Aparte de este uso común de typos, el mismo Pablo atestigua en términos lingüísticos su utilización para designar la interpretación tipológica del AT. Así, en 1 Cor. establece una relación entre la salida de Egipto y la historia de Israel en el desierto y los grandes acontecimientos de la vida cristiana: bautismo, eucaristía, obediencia (10:1–11). «Estas cosas —dice— sucedieron como ejemplos para nosotros, para que no seamos codiciosos de cosas malas… Estas cosas les acontecieron como ejemplos y están escritas para nuestra instrucción, para nosotros sobre quienes ha llegado el fin de las edades» (vv. 6, 11). Véase TIPOLOGÍA.