NEBO

Heb. 5015 Nebó, נְבֹו, del ac. Nabû = «llamar, anunciar», nombre de un dios babilónico y tres lugares de Palestina, o próximos a ella; Sept. Nabó, Ναβώ, v. Nabaû, Ναβαῦ, y en Is. > Dagón, Δαγών; Vulg. Nabo. El término geográfico podría indicar que este lugar fue uno de los centros del culto a Nebo; podría también provenir del aram. nabaa = «ser elevado», que denota los > lugares altos donde se ubicaban los santuarios paganos.
1. Divinidad principal del panteón asirio-caldeo (cf. Is. 46:1) que aparece con frecuencia en los textos cuneiformes con el nombre de Nebo, Nabu, Nabum. Protegía el saber y las obras literarias —«el más sabio de los dioses»—. La sede de su culto estaba en Borsipa, cerca de Babilonia. En las grandes festividades era conducido a Babilonia, y cuando Borsipa fue anexionada a Babilonia, se le consideró hijo primogénito de Bel-Marduk.
2. Ciudad moabita cerca de Nebo o sobre esta montaña, mencionada entre Sebán y Meón, este último una abreviación de Baal Meón (Nm. 32:3). Los gaditas y los rubenitas la solicitaron a Moisés por ser abundante en pastos para el ganado (Nm. 32:37, 38; 33:47). En 1 Cro. 5:8 aparece habitada por los rubenitas. A la muerte de > Acab, el rey > Mesa se rebeló y tomó la ciudad, hazaña de la se jacta en la llamada Estela de Mesa, líneas 14–18, donde se dice que además dio muerte a siete mil israelitas y que arrebató los vasos del altar de Yahvé. En tiempos de Isaías, la ciudad seguía en manos de los moabitas (Is. 15:2; cf. Jer. 48:1, 22). Según San Jerónimo, el santuario de Quemos estaba en Nebo (Comentario Is. 15:2, en PL, XXIV, 168). Probablemente se hallaba cerca de Khirbet el-Mhayiet, al sur de la montaña de Nebo-Siâghah.
3. Población mencionada inmediatamente después de Bet-el y Hai, de donde eran originarios 52 varones que regresaron del exilio en tiempos de Esdras (Esd. 2:29; Neh. 7:33). Conder la identifica con Nûba, al este de Khirbet Kîla, a 7 km. al suroeste de Beit Immar.