NOEMÍ

Heb. 5281 Naomí, נָעֹמִי = «mi delicia»; Sept. Noommeín, Νοομμείν, Noemín, Νωεμίν, Noemmeín, Νοεμμείν, Noemmeí, Νοεμμεί, Noommeí, Νοομμεί, Noemeín, Νωεμείν; Vulg. Noemi.
Mujer de Belén de los primeros días de los jueces, esposa de > Elimelec, que la llevó, junto con sus dos hijos, al país de Moab, a causa de una gran hambruna que asolaba Judá. Los hijos se casaron con mujeres moabitas. Cuando unos diez años después su esposo y sus dos hijos murieron, Noemí decidió volver a su tierra. Rut, su nuera, no quiso dejarla sola, sino que estaba dispuesta a dejar su tierra y su familia para irse con ella. Noemí trató de disuadirla en tres ocasiones (Rt. 1:8–9, 11–13, 15), mientras que Orfa, la otra nuera, se volvió atrás de su primera decisión (Rt. 1:14). Acompañada de Rut, Noemí volvió a Belén de Judá (Rt. 1–4). Pidió no ser llamada más Noemí, sino Mara, «amarga», porque, según ella, el Todopoderoso la había tratado amargamente. Las dos mujeres llegaron a Belén en abril, al comienzo de la siega de la cebada (Rt. 1:22) y al término de la cosecha del trigo (Rt. 2:23), que tenía lugar en junio. Siguiendo el consejo de Noemí, Rut quiso hacer valer sus derechos delante de su pariente > Booz, a quien consideraban su goel o pariente redentor. Según las leyes del levirato, si un hombre moría sin dejar descendencia, uno de sus hermanos, o el pariente más próximo, debía casarse con la viuda (Dt. 25:5–10). Como Booz no daba muestras de querer cumplir con su obligación de pariente redentor, Noemí diseñó una estrategia para acabar con el perjuicio que les provocaba aquel incumplimiento y, aunque el plan no estaba exento de riesgos y posibles malentendidos, Rut no dudó en ponerlo en práctica.
Consistía en lavarse, perfumarse, ponerse el mejor vestido, acercarse durante la noche a la era donde Booz aventaba la parva de la cebada, y acostarse a sus pies (Rt. 3:3–4). Pudiera parecer poco decoroso e inmoral, puesto que Rut iba a la era dispuesta a consumar una relación sexual con Booz; sin embargo, según la ley del levirato, era el acto sexual en sí el que establecía la nueva relación matrimonial: «su cuñado se llegará a ella, y la tomará por mujer» (Dt. 25:5).Véase LEVIRATO, RUT.