PULGAR

El más grueso de los dedos de la mano o del pie. En algunos ritos del AT se exigía poner sangre de un sacrificio «sobre el lóbulo de la oreja derecha y sobre el dedo pulgar de los manos derechas y sobre el dedo pulgar de los pie derechos (Ex. 29:20; Lv. 8:23; 14:14; etc). De esa manera se simbolizaba la completa consagración de la persona, su oír, su hacer y su caminar.
A los prisioneros de guerra se les cortaban a veces los pulgares de las manos y los pies como señal de ignominia (Jue. 1:6–7).