NAÍN

Gr. 3484 Naín, Ναίν; pob. del heb. Naín, נַאִין = «pastos verdes», o Naím, נַאִין = «placentero».
Ciudad (polis, πόλις) de Palestina mencionada en el NT, donde Cristo resucitó al hijo único de una viuda (Lc. 7:11–17). El Midrás le da el significado de «placentero» a un lugar llamado Naím en el territorio de Isacar, en Galilea (Bereshith rabbá, 88). Eusebio y San Jerónimo (Onomasticon) sitúan Naín al sur del monte Tabor, y no muy lejos de Endor. Opuesta al Tabor, y a una milla y media al norte de Endûr (sin duda, el Endor que se menciona en la Biblia), existe una villa llamada Neîn («agradable»), pronunciada por los árabes exactamente como Naín. Se halla en el ángulo noroccidental del Jebel ed-Duhy, colina llamada también Pequeño Hermón, a 3 km. al oeste-suroeste de Endor, y a 8 km. al sur-sureste de Nazaret. «Es interesante comprobar que en el lado sur de la misma cordillera de montañas está Sunem, donde Elías también resucitó al hijo de la mujer sunamita (2 R. 4:8–37)» (J. Rogerson).
Naîn es en la actualidad una aldea con algunas ruinas y grutas que sirvieron de sepulcros en el pasado.
«La puerta de la ciudad» (Lc. 7:12) puede haber pertenecido a una barrera construida para proteger al lugar de las tribus que merodeaban, como era siempre el caso en aquella zona. Un camino escarpado conduce a la villa, pasando por el sitio de una antigua iglesia que fue convertida en mezquita, Mukâm Lidna Aisa (Oratorio del Señor Jesús). La mezquita, que cayó en ruinas, fue reemplazada por otra en los alrededores. En 1880 los franciscanos compraron las ruinas del primer edificio, y levantaron encima una capilla. No lejos de ahí se pueden ver las tumbas pétreas de los judíos. Debido a esto, la historia gráfica de Naín encuentra una fácil localización.