Minerales de la biblia

La ciencia de mineralogía es de época muy reciente, y no existía en tiempos antiguos. Se hace imposible tener certeza de que el nombre de un mineral usado en la Biblia es usado con el mismo significado en la moderna mineralogía. Los siguientes metales son mencionados en la Biblia:
1) Piedras preciosas: ágata (Éx. 28:19); amatista (Éx. 28:19; Ap. 21:20); bedelio (Nm. 11:7); berilo (Dn. 10:6); calcedonia (ágata) (Ap. 21:19); carbunclo (Is. 54:12); coral (Job 28:18); coralina (sardio) (Ap. 4:3); cornerina (Ez. 28:13); crisólito (Ap. 21:20); crisopraso (Ap. 21:20); diamante (Éx. 28:18); esmeralda (Éx. 28:18); jacinto (Éx. 28:19); jaspe (Ez. 28:13); ónice (Gn. 2:12); pedernal (Éx. 4:25); perlas (Job 28:18); rubíes (Éx. 27:16); sardio (Éx. 28:17); topacio (Éx. 28:17); zafiro (Éx. 24:10).
2) Metales: cobre o «bronce» (Gn. 4:22); escoria (Sal. 119:119); estaño (Nm. 31:22); hierro (Nm. 31:22); oro (Gn. 2:11, 12); plata (Mt. 10:9); plomo (Éx. 15:10).
3) Minerales ordinarios: agua; alabastro (Mt. 26:7); azufre (Gn. 19:24); mármol (1 Cr. 29:2).