Lamec

Heb. 3929 Lémekh, לֶמֶךְ, o Lámekh, לָמֶךְ; Sept. y NT Lámekh, Λάμεχ; Josefo, Lámekhos, Λάμεχος (Ant. 1, 2, 2). Nombre de dos patriarcas anteriores al diluvio.
1. Hijo de Metusael, de la descendencia de Caín. Una de sus esposas le dio a Tubal-Caín, que inventó instrumentos de bronce y de hierro (Gn. 4:18–24). El discurso de Lamec a sus esposas puede ser interpretado de diversas maneras, pero la mayor parte de los comentaristas ven en ello una agravación de la ley de venganza (vv. 23, 24), recogida en un antiguo poema, la muestra más antigua de poesía hebrea profana. Según la ley admitida en los otros pueblos, el crimen de homicidio debía ser castigado con la muerte del asesino, o de uno de sus parientes; los descendientes de Lamec agravaron la ley existente ya entre los cainitas afirmando que la muerte de uno de los suyos debía ser vengada siete veces (Gn. 4:15). El autor sagrado recoge este cántico como un ejemplo de la proliferación de los males de la humanidad por culpa del pecado. A la «ley de Lamec» y a los males que de ella se siguen, Jesucristo opuso la ley del perdón: «Pedro se acercó y le dijo: Señor, ¿cuántas veces pecará mi hermano contra mí y yo le perdonaré? ¿Hasta siete veces? Jesús le dijo: No te digo hasta siete, sino hasta setenta veces siete» (Mt. 18:21–22).
2. Descendiente de Set a través de Matusalén, y padre de Noé. «Lamec temía a Yahvé y creyó en sus promesas» (Gn. 5:25, 28–31). Tenía 182 años cuando nació Noé y vivió otros 595 años, 777 en total.