CÁNTARO

CÁNTARO Muchas palabras hebreas y griegas que representan gran variedad de vasijas, recipientes o cubos, se traducen por «cántaro». Destinado a contener líquidos o alimentos, el cántaro es casi siempre una vasija de barro, muy variada en su forma y capacidad. En Gn 24:14–18, 20 es adorno en hombros de Rebeca y útil herramienta de trabajo en sus manos; en 1 R 18:34 se utiliza en la realización de un milagro. En Mc 14:13 y Lc 22:10 es guía hacia el aposento alto, ya que solo las mujeres acostumbraban cargarlos. En Jueces 7:16, 19, 20 es instrumento de guerra en manos del ejército de Gedeón. Abandonado junto al pozo de Sicar, es testimonio del espíritu abierto de Jesucristo que, a diferencia de otros judíos, sí usaba «vasijas en común con los samaritanos» (traducción reciente de Jn 4:9c; cf. v. 28).
A veces se emplea «tinaja» como sinónimo de cántaro (1 R 17:12, 14, 16; Jn 2:6ss). Véanse 1 R 7:50; 18:34; Ec 12:6 y Hag 2:16.