BEN-ADAD

BEN-ADAD Nombre de varios reyes de Damasco o Siria.
1. Ben-adad I (ca. 900 a.C.) se alió con Baasa, rey de Israel, contra Asa, rey de Judá. Pero Asa le ofreció los tesoros del templo con tal que rompiera el pacto e invadiera a Israel. Ben-adad aceptó y conquistó todo el norte del territorio israelita (1 R 15:16–22; 2 Cr 16:4).
Más tarde, cuando el rey Salmanasar III de Asiria amenazaba a Damasco, Ben-adad sitió Samaria a fin de obligar al rey Acab a aliarse con él contra el avance asirio (1 R 20:1–22). Acab derrotó a Damasco dos veces y capturó a Ben-adad. Le perdonó la vida a cambio de privilegios comerciales en Damasco y la devolución de ciudades israelitas tomadas por Siria en agresiones anteriores. El tratado resultante dio a Israel tres años de paz (1 R 20:26–34; 22:1).
En 853 a.C., Ben-adad se alió con varios estados pequeños, uno de ellos fue Israel, para resistir a Asiria. Se produjo luego la batalla de Qarqar tras la cual Asiria se adjudicó la victoria. Pero el hecho es que pasaron cinco años sin que estuviera en condiciones de realizar otra invasión. En el mismo año Acab quebrantó el pacto y atacó a Ramot de Galaad, ciudad que pertenecía a Damasco, empresa para cuya realización necesitó de la ayuda de Josafat, rey de Judá. Ben-adad los derrotó y Acab murió en la batalla (1 R 22:1–40).
Es posible que Ben-adad sea el mismo rey sirio a cuyo general, Naamán, Eliseo sanó de la lepra (2 R 5:1). Después, hallándose enfermo el rey mismo, envió su siervo Hazael a consultar con Eliseo respecto a su enfermedad. Cuando anunció el profeta que el mismo Hazael sería el próximo rey de Siria, este volvió a Damasco, asesinó alevosamente a su señor y ocupó el trono en su lugar (2 R 8:7–10; 14:15).
2. Ben-adad II (III según otros estudiosos que creen que hubo un Ben-adad II en la época de Omri de Israel) era hijo de Hazael. Empezó a reinar durante el reinado de Joás de Israel. Su país estaba tan debilitado por las constantes incursiones asirias que no pudo conservar el territorio que le dejó su padre. En tres batallas con Joás perdió las ciudades israelitas que su padre tomó (2 R 13:14–19, 25). Jeroboam II de Israel ganó aun más victorias sobre Siria y extendió su territorio hasta los límites del antiguo reino de David (2 R 14:25–28). Nada se sabe de su fin, pero se cree que murió cuando Salmanasar IV sitió a Damasco en 773 a.C. Le sucedió Tabeel (Is 7:6).