águila Ave rapaz de 80 a 90 cm de altura, que en algunas especies puede alcanzar 1 m de longitud y 2, 5 m de envergadura. Posee pico recto en la base y curvo en la punta, fuerte musculatura y vuelo rapidísimo. En la Tierra Santa viven unas ocho variedades de águilas y cuatro de buitres. A estos últimos parece referirse la Biblia cuando menciona la calvicie del águila (Miq 1:16) y su alimentación a base de carroñas (Pr 30:17; Mt 24:28; Lc 17:37). Por esto último figura entre los animales prohibidos (Lv 11:13; Dt 14:12).
Las costumbres del águila sirven en la Biblia para diversas comparaciones. El hábito de hacer su nido en las alturas (Job 39:27) simboliza la soberbia de Edom (Jer 49:16; Abd 4). La rapidez de su vuelo (Job 9:26; 2 S 1:23; Lm 4:19) representa la ligereza de un ejército para invadir pueblos extraños como Moab (Jer 48:40) y Edom (Jer 49:22), o al propio pueblo de Israel (Dt 28:49; Jer 4:13; Os 8:1; Hab 1:8). Ilustra también la prontitud con que se disipan las riquezas (Pr 23:5).
Para proteger sus crías y enseñarles a volar, el águila las obliga a salir del nido y vuela por debajo y al lado de ellas vigilando el primer vuelo. Esta figura ilustra en Éx 19:4, 5 y Dt 32:11 el cuidado amoroso de Dios con su pueblo. Es probable que sirva de base también a Ap 12:14.
En la visión de Ezequiel de la gloria divina hay una semejanza de águila, de significado discutido (Ez 1:10; 10:14), que vuelve a mencionarse en Ap 4:7. En la parábola de Ez 17, Babilonia y Egipto están simbolizadas por un águila.