CADENAS.

CADENAS. Varios vocablos griegos y hebreos se traducen a las lenguas modernas con la palabra «cadenas».
1) Después de la caída de Jerusalén en el año 586 antes de Cristo, Jeremías se encontraba «en cadenas», es decir, prisionero con varios compañeros (Jer. 40:1–4).
En sentido metafórico se usa para indicar las cadenas de la aflicción o del dolor, y a veces se usa la palabra «cuerdas», lo cual indica que muchos prisioneros eran atados con cuerdas y no con cadenas metálicas (Job 36:8).
2) También indica la serie de estrellas en el firmamento, especialmente las constelaciones de las Pléyades y de Orión (Job 38:31). Algunas versiones como la Nueva Biblia Española traducen la palabra hebrea por «lazos» o «ligaduras», en este pasaje, en vez de «cadenas».
3) La palabra puede usarse también para designar joyas (Éx. 28:14). Algunas versiones como la Reina y Valera traducen aquí la palabra hebrea por «cordones». También designa motivos ornamentales en el templo de Salomón (1 R. 7:17; 2 Cr. 3:5) y las cadenas puestas de adorno a los ídolos (Is. 40:19).
4) Designa, en sentido metafórico, el cuidado de Dios por Jerusalén (Éx. 16:11). A veces el rey regalaba a su favorito una cadena o collar (Dn. 5:29).
5) En sentido general se usa de todo aquello que liga, ata o une, ya en sentido material o moral (Hch. 26:29: He. 11:36; Ef. 6:20; Jud. 6).